Un nuevo chip cuántico diseñado en España ha captado la atención de la comunidad científica y de la industria de la seguridad informática por su potencial para redefinir los estándares de ciberseguridad a nivel mundial. Desarrollado por un consorcio de centros de investigación y startups deep tech españoles, este procesador es capaz de generar claves criptográficas con propiedades de aleatoriedad y complejidad inalcanzables para los sistemas clásicos, así como de implementar protocolos de distribución de claves cuánticas (QKD) más rápidos y robustos. En un momento en el que los avances en computación cuántica amenazan con debilitar la criptografía tradicional, la llegada de un chip nacional que integra hardware, software y algoritmos cuánticos supone un punto de inflexión para la soberanía tecnológica europea. A continuación, examinaremos el trasfondo técnico, las innovaciones clave, los casos de uso en ciberseguridad, los desafíos de implementación y las perspectivas de futuro de esta prometedora tecnología.